Mis lágrimas gritan palabras insurrectas,
insolentes, que no quieren ser oídas
no son atendidas, no existen para ti.
Me ahogo con el viento
como si fuera en picada
contra el mar
a mil kilómetros por segundo.
Vomito las heridas
que mancharon los momentos
recuerdo la compañía
te encuentro entre llantos
estallan las estrellas
en mi estómago dañado
exijo tu cuerpo
no obtengo respuesta
me desplomé en tus manos
no me oíste.