Eres el centro de mi mundo, en torno a ti todo gira aunque en medio exista una distancia carente de luz y movimiento, de pronto todo se derrumba y estás tú... ya basta, más de tres páginas solo para ti, nada más.
Conversaciones bajo armonía y calma, un entorno apacible está sin darnos cuenta, lo miramos sin observar, un silencio tan cómodo, unas miradas seductoras y fugaces debajo de aquel encandilante sol que nos impide un contacto mayor, pero aun así sé en qué piensas y sí, pienso en ti.
No puedo evitarlo, eres tú mi mente!
Malestar intenso, no sé donde, no sé porqué, me exacerba a tal punto de necesitarte, no quiero depender, no quiero ser, no quiero aquí estar...
He perdido muchas cosas, y existe un miedo, te observo, extasiada por esta (para nada nueva, pero sí diferente) sensación... delicadas gotas de lluvia me adormecen inconscientemente y en los sueños es cuando vuelvo a mí, pero ahora ése mí es tan disímil, sin embargo lo soporto, aunque sea todo tan bueno y pseudo-perfecto.
Puede más bien ser un intento de un algo confuso, que perfectamente no sea lo que creo, y cómo comprobarlo, cómo saber...
Existen momentos de frustraciones -a los cuales soy bastante vulnerable- mas jamás pensé en persistir pero hay cosas que cambian y quizá desperté de una vez por todas.
Y sigues ahí mirándome, me inquietas, me desconcentras...
Fin... ?
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